Se presentaba Ainhoa Arteta en el Palacio de Congresos de Salamanca, para cantar a los grandes clásicos españoles, con muchas ganas y emocionada, ya  “que le encanta Salamanca  y la crió una salmantina de Tamames”. Llegó dispuesta a disfrutar y  a hacer disfrutar al publico asistente.

La soprano, actuó junto al magnífico pianista Víctor Carbajo. Ambos realizaron un homenaje a los grandes clásicos españoles del cancionero universal: Falla, Turina, Granados o Obradors son algunos de los grandes compositores por los que hicieron un recorrido excepcional con su voz envolvente, interpretando las grandes obras españolas. Ainhoa Arteta ha cantado en los mejores teatros del mundo, no obstante, su ADN español jamás le ha abandonado. Esto se refleja en su voz, cargada de emoción e intensidad. La artista española no sólo ha logrado la excelencia técnica, sino que ha conseguido algo todavía más complicado: rozar el alma del espectador en cada canción. Junto a su experiencia operística, el recital es parte fundamental en la singladura de la artista, en el que deslumbra por su carisma, versatilidad e incomparable capacidad de comunicación.