Alice se presentaba en el Palacio de congresos de Salamanca, desplegando desde el primer acorde su sensibilidad y delicadeza. La joven artista indie desgranó sus temas más conocidos y poco a poco fueron llegando uno tras otro “The world is changing”, “Corazón mármol”, “No te vayas”, “Que se joda todo lo demás”, “La locura” “O”. “Yo quisiera”, la canción con la que acudió a Benidorm en un intento de llegar hasta Eurovisión con su piano y esa voz profunda y seductora con la que es capaz de movernos algo por dentro.  Otro de los temas coreados por el público asistente fue “Por si apareces”, un tema dedicado a los Ex que vuelven y desaparecen una vez más. El punto y final, lo ponía como no podía ser de otra forma con ‘¿Quién Soy?‘. Alice Wonder transmite mucho con su personalísima voz, tanto cuando desciende casi al susurro, como cuando se eleva hacia lo grandioso. Sus conciertos son una montaña rusa de emociones, cumbres de rock, electrónica y derroche de energía veinteañera, con valles de delicadeza absoluta en la que nos abre su mundo con sensibles melodías y esa voz quebrada que nos hace cerrar los ojos y disfrutar.

Alicia Climent Barriuso sigue en un ascenso imparable y lo demuestra cada vez que se sube a un escenario.