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La Plaza Mayor se transformó esta noche en un auténtico templo del rock andaluz. Medina Azahara ofreció a las 22:00 su esperada actuación dentro de la gira de despedida “Todo tiene su fin”, enmarcada en las Ferias y Fiestas de la Virgen de la Vega.
Desde primeras horas de la tarde, salmantinos y visitantes comenzaron a llenar el ágora barroca, conscientes de estar ante un momento histórico:, tras el éxito con entradas agotadas en el Palacio de Congresos.
En esta ocasión, la banda desplegó toda su energía sobre un escenario al aire libre, con un repertorio cargado de himnos que forman parte de la memoria colectiva. Sonaron piezas imprescindibles como “Necesito respirar”, “Palabras de libertad”, “Paseando por la mezquita”, además de la emotiva “Solo y sin ti”, que estremeció a los presentes.
La velada estuvo impregnada de complicidad entre público y artistas. Tras más de 45 años de carrera, Medina Azahara protagonizó una noche simbólica y conmovedora, reafirmando un legado que trasciende generaciones. Salamanca respondió entregada, coreando cada canción y agradeciendo a la banda haber sido parte de la banda sonora de sus vidas.
Como guiño festivo, el grupo sorprendió con un fragmento del mítico “The Final Countdown”, homenajeando el concierto de Europe del próximo domingo, un detalle que desató la euforia de los miles de asistentes.
Medina Azahara se despidió con emoción y orgullo de una Plaza Mayor abarrotada, que devolvió con aplausos el reconocimiento a una de las formaciones más longevas e icónicas del rock español.
